Von Goethe y el amor

Las penas del joven Werther” de Johann Wolfgang von Goethe es uno de los casos más típicos en donde se ve un gran amor. El mismo autor fue conciente que su obra fue en muchas ocasiones un modelo a seguir, muchos jóvenes empezaron a vestirse y a actuar como el personaje, y lo más peligroso de todo, algunos de ellos hasta planificaron cuidadosamente su suicidio.

En una primera parte de la novela se encuentra compuestas por las cartas de Werther manda a su amigo Wilhelm, desde el lugar en donde se había retirado a escribir, leer y pintar, al comienzo de su estadía todo se desarrolla con tranquilidad. Luego conoce a la hija del administrador Charlotte S. de quien se enamora a primera vista:

“Descendí del carruaje y una criada que había salido al portón nos rogó que esperásemos un momento. La señorita Lotte no tardaría en venir. Crucé el patio hasta llegar a la casa, una notable edificación y luego de subir las escalinatas y pisar el umbral de la puerta presencie el espectáculo más encantador que jamás habían visto mis ojos. En el vestíbulo había seis niños. De entre once y dos años de edad, que se arremolinaban en torno de una muchacha hermosa de estatura mediana, que llevaba un simple vestido blanco con moños rosados en las mangas y en el pecho. Sostenía un pan negro y le cortaba un trozo a cada uno de los pequeños a su alrededor, en proporciones de acuerdo con su edad y el apetito, se lo entraba con tanta gracia y ellos, que estiraban los brazos para recibirlo aun antes de haber sido cortado, agradecían con total naturalidad, después se alejaban dando saltos, contentos con la comida, mientras los más tranquilos salían hacia el portal del patio para ver a las visitas y el coche en que iba a partir su Lotte.”

La joven muchacha le cuenta a Werther que se encuentra comprometida con Albert, entonces ellos se conocen, le cae bien y cuanto más imposible se vuelve ese amor más pasión despierta en él.
Cuando Lotte y Albert se casan y le informan que ya sus visitas los incomodan él planea quitarse la vida. Pero no lo hace de una forma apresurada, sino que planea todos sus detalles. Entre sus detalles Werther manda a un criado a la casa del matrimonio para pedirles prestadas las pistolas de Albert. Charlotte se las manda y entonces Werther escribe:

“Han pasado por tus manos, les has quitado el polvo, las beso mil veces, las has tocado. ¡Y tú, espíritu del cielo, facilitaras mi acción! ¡Y tu Lotte me entregas las armas! ¡Tú, de la que yo deseaba que fueran sus manos las que me acercaban la muerte y ahora me la acercan!»

Luego de matarse Werther es enterrado con su traje azul y su chaleco de color amarillo, ropa que uso la primera vez que bailó con Lotte.

Este articulo cuenta con fragmentos de Las Penas del joven Werther. De Goethe

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